No pudo ser
22/6/2004 - 09:56 - Enviada por Borja del Pozo Castillo
La UD. Almería despidió la temporada 2003-2004 con una visita al estadio gaditano del Carranza que se saldó con una derrota ante el Cádiz (2-1), que se mostró más ofensivo y con más ganas en esta última jornada. El partido, marcado por el aire de fiesta y libre de cualquier tensión, no tuvo dueño hasta pasada la primera media hora de juego. Después, los almerienses se dejaron dominar y encajaron los dos goles. El Polideportivo Ejido consiguió la permanecia frente al Xerez al vencer en Santo Domingo (1-0). Un gol de Calado en la primera mitad bastó en un partido en el que los azulinos no se jugaban nada. Por su parte, el Algeciras, ya descendido desde hace varias semanas, se despidió de la categoría con una derrota ante el Ciudad de Murcia, triunfo que deja a los de Zambrano en Segunda (2-0).Diez mil espectadores contemplaron cómo el Numancia volvía a conseguir la máxima categoría cinco años después del descenso. Un cómodo 2-0 frente al Recreativo sirvió para culminar una temporada magnífica. La UD. Salamanca se impuso al Elche (1-2) en un partido sin trascendencia, puesto que ambos equipos ya estaban salvados del descenso. El partido, adelantado al viernes, no fue bueno y los fallos, tanto de charros como de ilicitanos, no tuvieron gran importancia al tratarse de un puro trámite. El Sporting de Gijón se despidió de su afición imponiéndose al Málaga B por la mínima (1-0) en un partido completamente intrascendente. El ambiente festivo dominó el encuentro incluyendo una invasión del terreno que hizo que se interrumpiera durante 10 minutos. En el partido con menos ambiente y tensión de la temporada, Terrassa y Levante deleitaron a los pocos aficionados del Olimpic con ocho goles repartidos por igual (4-4). El festival goleador acabó con los espectadores en el campo festejando la continuidad del equipo en la Segunda y pidiendo al presidente la continuidad de Mario Gibanel en el banquillo egarense.
El Getafe entró en Primera división por la puerta grande gracias a una actuación antológica de Pachón, quien, con cinco tantos, lideró a la escuadra madrileña en el día más grande de su historia (3-5). El Leganés, al que el descenso administrativo del Compostela permitió jugar esta temporada en Segunda, certificó su descenso a Segunda B tras perder 0-1 ante el Córdoba, que seguirá un año más en la categoría de plata, en un encuentro en el que los pepineros pagaron su escaso poderío ofensivo. El Rayo Vallecano ni siquiera se acercó al “milagro” de la permanencia en la última jornada, en la que los goles de Mariano y Rubén firmaron la previsible condena del conjunto madrileño al descenso a Segunda B (1-2).
No pudo ser. El Alavés vio frustradas todas sus ilusiones de ascenso en un último partido resuelto sólo al final frente a un Eibar que fue de menos a más (1-2), pero las victorias de Getafe y Numancia le dejaron sin premio para desesperación de la gran afición albiazul desplazada a Ipurúa. El Glorioso deberá ahora ilusionar a sus seguidores para la temporada que viene, en la que el ascenso volverá a ser la gran asignatura pendiente. El objetivo de Primera estuvo en muchas semanas fuera del alcance y después de 42 jornadas se premia la regularidad y sube quien se lo merece, con lo que poco más queda por decir que... AUPA ALAVES!!!